viernes, 2 de noviembre de 2012


ARTICULO DE REFLEXION PEDAGÓGICA
TITULO: LA HERMENÉUTICA FRACTAL, UNA HERRAMIENTA DIDACTICA PARA LA ENSEÑANZA DE LA FILOSOFIA
AUTOR: ALVARO RAFAEL CAMPUZANO PINEDA
PALABRAS CLAVES: HERMENÉUTICA FRACTAL, FRACTO, AUTONOMIA, CAMINO, PUNTO.

RESUMEN:
El presente artículo hace parte de una investigación que se lleva a cabo en el Colegio Abraham Lincoln, la cual busca un Aprendizaje Significativo de la Filosofía. La enseñanza de la filosofía conlleva retos frente a los adolescentes, entre los cuales se encuentra el de la motivación para leer. Para buscar hacer frente a este reto se propone una herramienta didáctica que es la Hermenéutica fractal, implementada por el profesor Sopó en la Universidad Santo Tomás, y que pretende al mismo tiempo de motivar a la lectura, generar espacios de formación en la autonomía.

ABSTRACT:
Principio del formulario
This article is part of a research carried out at the Abraham Lincoln school, which seeks a significant learning of philosophy.Teaching philosophy involves challenges facing adolescents, amongwhom were the motivation to read. To seek to address this challenge we propose a teaching tool that is the fractal Hermeneutics, implemented by Professor Sopo in St. Thomas University, and aims at the same time to encourage reading, create opportunities for training in autonomy.
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LA HERMENÉUTICA FRACTAL, UNA HERRAMIENTA DIDACTICA PARA LA ENSEÑANZA DE LA FILOSOFIA

La Filosofía ha sido perseguida y acusada durante años por los vaivenes emocionales de la adolescencia, para algunos estados de ánimo es la respuesta a la rebeldía y para otros sencillamente no sirve, porque se trata de repetir lo mismo. En esta persecución se presenta otro acusador, el docente acompañado por su método de enseñanza de la filosofía, quien permite con sus términos confusos y con su voz pasiva que sea alimentada la primera acusación. Es por esto que me he propuesto poner en práctica un “Aprendizaje significativo de la filosofía”, donde dentro de sus objetivos, se encuentran los dos que se van a abordar en este ensayo, a saber: ¿cómo lograr que el adolescente se motive a leer filosofía? y ¿cómo formar en la autonomía a partir de la lectura?

Empezaré por el primer interrogante ¿cómo lograr que el adolescente se motive a leer filosofía? En una de mis visitas a las aulas de la Universidad Santo Tomás, por cierto mis aulas, me encontré con algunos compañeros del Estudiantado Filosófico Salesiano y les pregunté ¿qué están haciendo?, su respuesta: estamos haciendo fractos. Fue en ese momento en que me puse en camino. Luego de un gran diálogo, logré saber que se trataba de la Hermenéutica Fractal, una propuesta pedagógica lúdica del profesor Ángel María Sopó, quien había sido mi profesor de Hermenéutica en esas mismas aulas.
En ese diálogo descubrí la respuesta al primer interrogante, puedo lograr que por medio de los fractos los estudiantes del Abraham Lincoln se motiven a leer filosofía. Por lo tanto, ¿en qué consiste la hermenéutica fractal? “la hermenéutica fractal del texto lo que propone es traducir en una imagen  fractal llamada “fracto”, lo que estaba oculto en el texto, como son las relaciones y las valoraciones conceptuales en su complejidad fractal” (Sopó, 2002), y ¿qué es un fracto? “es el modo como un texto se puede leer de otra manera, tal como sucede en la representación teatral” (Sopó, 2002). Es así, que se inicia la experiencia ofreciéndole un texto al estudiante y pidiéndole que realice los siguientes pasos para elaborar el fracto: 1. Lea el texto; 2. Vuelva a leer el texto; 3. Determine cuál es el punto; 4. Seleccione las categorías. No se debe olvidar que a la mano debe haber reglas y colores, la hermenéutica fractal es lúdica.
En este momento me centraré en los dos primeros pasos, leer y volver a leer. La reflexión parte de la motivación de los estudiantes para leer y ¿se le pide leer dos veces un texto?, así es. Entonces, “¿Qué es propiamente leer?” (Gadamer, 1999: 135), se puede decir que leer es vivir la experiencia sensible de encontrarse con el otro, y la única forma de encontrarse con el otro es comprendiéndolo  y “para comprender es preciso leer y releer una y otra vez” (Sopó, 2002: 98). Al tratarse de un texto, se trata de saber escuchar comprensivamente al otro y esto se logra en el paso 3: descubriendo el punto. “Aquel punto que constituya el punto más seguro y el más firme es el punto central, es decir, la pregunta del texto” (Sopó, 2002: 99) La pregunta del texto es aquello que busca responder el autor dentro de su tratado, lo que pretende dar a conocer. Para lograr encontrarlo se necesita ponerse en camino, el camino es la pregunta y saber escuchar. Después de haber encontrado el punto se seleccionan las categorías que le van a dar fuerza al mismo y se le permite a la imaginación trazar el fracto, este es el momento donde la filosofía se vuelve lúdica, juego, fiesta.
Hasta este momento he trabajado el primer objetivo, ahora pasaré al segundo ¿cómo formar en la autonomía a partir de la lectura? Se tiene una ventaja, ya se está en camino, ahora se necesita continuarlo, hay que saber escuchar, hay algo oculto en el texto que viene hacia mí, debo dejar que el texto me susurre y para lograr escucharlo debo omitir los juicios, “porque no se trata de leer y releer una y otra vez, sino de escuchar una y otra vez prestando oído a lo que dice el texto para corresponder” (Sopó, 2002: 95)
Entonces ¿Qué tiene que ver el desarrollo de la autonomía con el escuchar?, la clave está en la actitud de epojé, es decir, omitir los juicios. Cuando se omiten los juicios, el ser humano queda liberado de su realidad de ser para y queda en disposición de escuchar todas las posibilidades que giran a su alrededor. Estas posibilidades le permiten ser y es aquí donde entra la fascinación, donde se disfruta ver al estudiante dibujando trazos, donde en términos kantianos, usa su propio entendimiento y recrean su mundo. No hay condiciones de ideas principales y argumentos secundarios, lo importante es escuchar sin prejuicios. El estudiante tiene su atención centrada en el fracto, “piensan e imaginan que hacer un fracto es entender un mundo, e ir más allá, para crear un mundo propio” (Sopó, 2002: 100), alcanzan “la mayoría de edad” (Kant: 1784)
Esta autonomía kantiana se logra ver reflejada cuando el estudiante tiene la valentía de hacer uso público de su razón, en el momento que comparte sus fractos con los compañeros y genera debates que permiten crecer en el conocimiento.
Es de esta forma como se ha logrado en el colegio Abraham Lincoln buscar vencer algunos obstáculos emocionales frente al acto de leer y como se ha formado en la autonomía desde la creatividad y la imaginación.

BIBLIOGRAFIA
Campuzano, A. (2011) Als Quest, Aprendizaje Significativo de la Filosofía, basado en la
                didáctica de la imagen y la palabra. Bogotá: Colegio Abraham Lincoln
Gadamer, H. (1999) ¿Quién soy y quién eres tú? Barcelona: Herder
Kant, E. (1784) Respuesta a la pregunta ¿qué es la ilustración? Konisberg.
Sopó, A. (2002) Cuadernos de Filosofía Latinoamericana Números 86 – 87, La
              Hermenéutica Fractal del texto. Bogotá: Universidad Santo Tomás.
Sopó, A. (1989) Cuadernos de Filosofía Latinoamericana Números 38 – 39, La
Hermenéutica como alternativa pedagógica en la educación para la mayoría de edad.     Bogotá: Universidad Santo Tomás.